Los directores técnicos del Alianza y del Águila intercambiaron palabras y se manifestaron el deseo de poder enfrentarse en la final del Apertura 2015 del futbol Salvadoreño. Un objetivo de colegas con buenas intenciones el uno hacia el otro, pero también de dos entrenadores con hambre de victoria. El deseo no se les cumplirá a los sudamericanos Rubén Alonso ni a Eraldo Correia, pues el camino ha llevado a que se enfrenten en semifinales. Solo uno es el que estará en la gran cita, donde se encontrará al Isidro Metapán o al FAS. que en el partido de ida quedaron 2 a 1 a favor de Fas.
“Soy muy amigo de Eraldo. Lástima porque lo esperaba en la final”, dijo en estos días Alonso.
El Alianza llega a las semifinales después de 1 torneo en el que su balance le permitió cerrar en la tercera casilla y de la mano de Alonso ha construido su identidad con jugadores nuevos en el plantel como Rodrigo Rivera y Juan Carlos Portillo, algunos experimentados ya identificados por la afición como Fito Zelaya, Martínez De Paz y jóvenes como José Blanco y Rodolfo Orellana. Todos han dado un concepto de conjunto a los blancos, que en la fase anterior levantaron dos goles de desventaja en un lapso de 13 minutos para certificarse como uno de los mejores cuatro del torneo.
“A veces pienso que soy muy exigente, pero para el jugador que no sea una final, que me lo diga o que diga que está enfermo”, aseguró el entrenador.
Águila, por su parte, asiste hoy a la cita en el estadio Cuscatlán con la ilusión que dejó en el equipo la eliminatoria ante Pasaquina (global 2-0) y la cifra de 99 goles que tiene en su cuenta el delantero panameño Nicolás Muñoz, el cual hoy podría ser centenario con la camiseta de los emplumados, aunque el juego contra los blancos se prevé como complicado, y más como visitante.
“Soy muy amigo de Eraldo. Lástima porque lo esperaba en la final”, dijo en estos días Alonso.
El Alianza llega a las semifinales después de 1 torneo en el que su balance le permitió cerrar en la tercera casilla y de la mano de Alonso ha construido su identidad con jugadores nuevos en el plantel como Rodrigo Rivera y Juan Carlos Portillo, algunos experimentados ya identificados por la afición como Fito Zelaya, Martínez De Paz y jóvenes como José Blanco y Rodolfo Orellana. Todos han dado un concepto de conjunto a los blancos, que en la fase anterior levantaron dos goles de desventaja en un lapso de 13 minutos para certificarse como uno de los mejores cuatro del torneo.
“A veces pienso que soy muy exigente, pero para el jugador que no sea una final, que me lo diga o que diga que está enfermo”, aseguró el entrenador.
Águila, por su parte, asiste hoy a la cita en el estadio Cuscatlán con la ilusión que dejó en el equipo la eliminatoria ante Pasaquina (global 2-0) y la cifra de 99 goles que tiene en su cuenta el delantero panameño Nicolás Muñoz, el cual hoy podría ser centenario con la camiseta de los emplumados, aunque el juego contra los blancos se prevé como complicado, y más como visitante.